Rebelión en la gran pantalla. Repensando el cine chino a través de Trilogía Roja de Zhang Yimou.

Rebelión en la gran pantalla. Repensando el cine chino a través de Trilogía Roja de Zhang Yimou.

Neruska Rojas

Neruska Rojas
Centro de Estudios Históricos de Venezuela (CNEH)
Centro de Estudios Venezolanos sobre China (CVEC)
nerurojas87@hotmail.com

En la historia del cine chino están inscritos los nombres de diversos creadores que, con gran ingenio, han realizado obras inolvidables las cuales dejaron su marca impresa en la memoria colectiva de los espectadores. Estas piezas son el resultado del arduo e incansable trabajo en equipo de quienes buscan no solo reflexionar sino también exponer los matices de una época, personajes, hechos, sentimientos, emociones y experiencias que hacen de la película un documento histórico con un alto valor artístico.

 

En el caso particular de China, uno de los máximos exponentes del arte cinematográfico desde las últimas décadas del siglo XX es el galardonado director Zhang Yimou, conocido por películas como Sorgo Rojo (1987), Judou (1990), La linterna roja (1991), La historia de Qiu Ju (1992), Vivir (1994), entre otras. Zhang se graduó en la Academia de Cine de Beijing en el año 1982 y, junto a sus compañeros de promoción, pertenece a la Quinta Generación de Directores, quienes se valieron de sus cámaras y creatividad para explorar los problemas socioculturales de la nación.


Zhang Yimou en To Live (1994)

 

Su estilo como creador queda reflejado en la forma rebelde de contar historias valiéndose de impactantes representaciones visuales, a través del uso de los colores y el rol que desempeña el personaje femenino en la narrativa del film. Las películas de Zhang son consideradas un valioso recurso para la comprensión del papel que juega la mujer en la sociedad china tradicional:

Los historiadores y críticos de cine concuerdan que en el juego de total de imágenes y recursos visuales apuntan hacia la redefinición de la propia identidad china. En sus primeras obras, el imaginario sobre dicha identidad se expresa en poder sexual, la reproducción/fertilidad y el espectáculo que genera el cuerpo femenino en la gran pantalla. Hermosas mujeres jóvenes interpretadas por la estrella Gong Li, son la esposa–hija–madre–amante–virgen–vampiro.

(Mary Farquhar, 2002).

 

Explorando la sexualidad/sensualidad en las películas de Zhang Yimou

En las primeras películas de Zhang Yimou el personaje femenino fue interpretado por su bella musa, la actriz Gong Li, quien dio vida a los más diversos roles como madre, esposa, hija, heroína y villana. La caracterización de Gong Li varía considerablemente en todas las historias de Zhang. No en vano, podemos apreciar cómo en sus películas se exploran diferentes aspectos de la personalidad femenina sometida a presiones familiares, matrimonios obligados, pobreza, ansiedad y soledad.


Gong Li en La linterna roja (1991)

 

En términos generales, la producción cinematográfica de Zhang Yimou expone cuestiones de género y la lucha de clases, temas que invitan a la discusión sobre las profundas raíces de la sociedad patriarcal en el contexto chino. La historiadora Mary Farquhar (2002) subraya que hay tres películas las cuales merecen ser consideradas como elementos claves de la obra maestra del reconocido cineasta:

Su poder visual [refiriéndose a la trilogía Sorgo Rojo, Judou y La linterna roja] descansa sobre la sexualidad femenina como espectáculo en pantalla. Su fuerza narrativa se basa en reformular el debate sobre la realidad China de principios del siglo XX, el patriarcado, la liberación y la modernidad […] un denominador común en la obra de Zhang Yimou es la existencia personajes femeninos [quienes sin importar las motivaciones individuales] desafían los sistemas que las amenazan. […] Por lo tanto, la liberación del deseo en las películas de Zhang personaliza la búsqueda de la emancipación colectiva de China [acto] que fue prometido pero nunca llegó.

A través de la Trilogía Roja, Zhang Yimou exploró las diferentes expresiones de los deseos reprimidos de la población en medio de un contexto caracterizado por una sociedad adoctrinada bajo los principios del comunismo. Así vemos como el tema de la sexualidad es un aspecto recurrente tanto en Sorgo Rojo (1987) como en el film Judou (1990), recurso empleado por el director para reflejar el impacto de las normas sociales implementadas desde el buró del PCCh.

Durante el año 1987, cuando Sorgo Rojo fue estrenado en las principales salas de cine, China estaba experimentando un álgido movimiento protagonizado por estudiantes, artistas e intelectuales, quienes exigían mayores reformas en pro del beneficio del país, de modo que el PCCh no concentrase todos los esfuerzos de la maquinaria política en el sector económico. El tema principal en esta película reflejaba una esperanza latente en el seno de la juventud, la cual exigía entre otras cosas la relajación de los mecanismos de censura no solo en el cine, sino también en la radio y la televisión.

La diferencia en la explicitación de la sexualidad entre Sorgo Rojo y Judou se correlaciona con la forma en que los censores del gobierno recibieron el mensaje de ambas producciones cinematográficas, determinando dónde y cómo podían ser distribuidas. Dicha libidinosidad era recreada a través de desnudos y escenas de gran carga erótica, diseñadas para explorar los deseos, temores y ansiedad de los personajes en ambas historias. El primer film tuvo el mérito de estar entre las principales producciones de la Quinta Generación de Cineastas Chinos, que logró gran aceptación por parte de la audiencia doméstica. Sin embargo, el segundo no contó con tanta suerte ya que por su contenido sexual fue considerado una producción nociva y, por tanto, prohibida temporalmente por el aparato de censura del gobierno central.

 

La figura de la mujer en el cine de Zhang Yimou

Los conocedores de la obra del director Zhang Yimou concuerdan que uno de los principales atractivos de sus películas se encuentra en la narrativa visual, lo que se traduce en la escogencia de los escenarios, el montaje, la fotografía y el distintivo uso de ciertas tonalidades que vienen a reforzar el valor emocional de la toma. En consecuencia, su particular estilo artístico es lo que ha logrado seducir la mirada de la audiencia local y extranjera. No en vano, fue uno de los primeros creadores chinos reconocidos por la industria de Hollywood tras el estreno de Héroe (2002).

La técnica cinematográfica de Zhang atrajo mucha atención hacia los años en los que culminaba la ya mencionada Trilogía Roja, en especial por parte de aquellos que se sintieron enamorados –o con un profundo e irrefrenable odio– de los personajes principales y la manera en cómo fueron narradas sus historias, en las cuales el rol femenino es sin lugar a dudas una pieza clave para el desenlace de la cinta.

En sus películas, él explora –a la vez que denuncia– el lado oscuro de la sociedad tradicional china a través de la complejidad del personaje femenino, quien, en dos horas o más, debe superar incontables dificultades para ganar no solo la simpatía sino también empatía por parte del público asistente en las salas de cine. Esta relación entre personaje y espectador se plantea, entre sus principales objetivos, sentar las bases para la reflexión sobre las raíces de los roles tradicionales entre ambos géneros, cuestionando dinámicas, espacios y discursos que insisten en mantener a la mujer bajo la lógica dominador–dominado, siendo ella una de las principales víctimas de los vicios sexistas aún vigentes en la sociedad tradicional asiática.

En el caso de Sorgo Rojo, el film cuestiona la lógica tradicional que enclaustra el papel que debe o no desempeñar la mujer en el entramado social. En este sentido, el director señaló que:

…estos hombres y mujeres, siendo directos y a la vez optimistas, expresaban calor y vigor a través de sus cuerpos profundamente comprometidos con la existencia de la vida y la muerte, mostrando el confort y la felicidad a voluntad […] Yo hice Sorgo Rojo tan intensa y abierta tal como lo hago hoy, pero con la intención de contar de una manera sencilla y directa, el significado de la vida de un hombre que vive a través de un soplo (Zhang Y., 1998).

Uno de los detalles más representativos y polémicos de esta película se encuentra en un mensaje codificado en el tema que se repite muchas veces: sister go forward bravely / go forward / do not come back. Cuando la canción fue difundida por primera vez en China se volvió muy popular tanto en el campo como en las ciudades a pesar de estar dirigida hacia los hombres. El mismo director subrayó el importante valor simbólico del rol femenino a través del cual quería presentar una imagen fuerte, rebelde y desafiante. Sin embargo, admite que al final de la cinta la protagonista no logró huir de las responsabilidades “inherentes” a su condición de mujer y madre.

En el caso de Judou, la atención se enfoca en dos temas tabús para la sociedad china tradicional: incesto y parricidio. El personaje principal femenino, una mujer campesina, se presenta como una chica insumisa quien de manera desafiante dijo “no” al patriarcado. Con el fin de liberarse del control opresor masculino, la protagonista cometió incesto y junto al sobrino de su marido, se rebelan contra el tío y todo lo que él representa.

En esta historia la joven Judou es de espíritu rebelde, leal a la idea de no sucumbir ante las fuerzas invisibles del destino y a pesar del hecho de que su cuerpo fue vendido al personaje Yang Jinshan, ella se mantiene fiel al principio de conservar su alma independiente. Si bien Yang Jinshan compró su cuerpo con dinero, ella decidió usar su atractivo femenino como un arma para ganar autoridad. Judou es una chica valiente y determinada, sobre todo en aquellos momentos donde debe hacer frente a los instintos humanos.

Yang Tianqing, el joven sobrino y futuro amante de Judou, es por naturaleza indeciso. Para Zhang Yimou, él es una clara representación del hombre chino tradicional; en definitiva, un individuo típico. La pugna entre sus múltiples contradicciones tuvo como consecuencia que no lograse controlar sus impulsos, instintos ni deseos, de ahí que no tuviese éxito en resistirse a la seducción de Judou quien lo necesitaba, no solo para satisfacer sus impíos anhelos, sino también para deshacerse del rancio control de Yang Jinshan.

El director continuó explorando la explotación femenina en el contexto de la sociedad tradicional a través del film La linterna roja. En esta cinta, Zhang Yimou escogió la historia de cuatro mujeres, esposas y doncellas, que compiten por el poder y la riqueza valiéndose de distintos trucos para ganar el premio mayor: ser la mujer más amada del co–protagonista Chen Zuoqian.

 

El rol principal recae en la figura de Songlian, quien huyendo de la pobreza en su pequeña villa, se convirtió en una de las esposas del acaudalado Chen, decisión que la llevó a sucumbir ante el orden tradicional del patriarcado chino. Desde su perspectiva y firmemente convencida del papel que debía desempeñar la mujer, aceptó sin mayor resistencia el hecho de que debía renunciar a su independencia subordinándose ante el hombre a cambio de la posibilidad de alcanzar una mejor vida material.

Frente a las reglas del patriarcado tradicional, la bien educada Songlian tenía en su interior la llama de un espíritu rebelde, elemento recurrente en la Trilogía Roja de Zhang Yimou. Sin embargo, sus esfuerzos para captar la atención del señor de la casa resultaron en vano y su tímida rebelión terminó en un lamentable fracaso que la llevó a la locura al tiempo que el dueño del harén recibía a su quinta consorte.

Historiadores como Mary Farquhar coinciden en que las cintas de la citada Trilogía constituyen una severa crítica al modelo cultural de la China de los años 30. En sus películas, el hombre viejo personifica un sistema que se niega a renunciar al poder y en este orden de ideas, la libertad solo logra alcanzarse por la vía del parricidio –real o simbólico– orquestado por la figura del hijo quien actúa según la voluntad y deseo del personaje femenino. Este denominador común es uno de los aspectos distintivos en la obra de Zhang Yimou: la constante aparición del personaje principal protagónico con una personalidad fuerte y desafiante, quien ya sea por amor, justicia o sobrevivencia, pone en jaque al sistema patriarcal que atenta contra su libertad individual.

 

Para seguir leyendo:

(2003) Cui Shuqin.
Women through the Lens: Gender and Nation in a Century of Chinese Cinema.
Honolulu: University of Hawaii Press.

(1998) Li, E.
Zhang Yimou said.
Shenyang, ChunFeng Wenyi Press.

(2001) Gateward Frances (Ed.).
Zhang Yimou: Interviews.
University Press of Mississippi.

(2004) Zhang Yingjin.
Chinese National Cinema (National Cinemas Series).
Routledge.

(1998) _________________.
Encyclopedia of Chinese Film
Routledge.

 

Artículos web:

Mary Farquhar, Zhang Yimou.
In: Sense of Cinema. Great Directors, Mayo 2002
http://sensesofcinema.com/2002/great-directors/zhang/ 2016/05/30

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