Mi padre y la diosa Kuan-Yin
- Mi padre y la diosa Kuan-Yin - 8 abril, 2022
- Encuentros. De nuevo con Paloma Chen - 1 noviembre, 2021
- Paloma chen: el grito poético de los olvidados de la vida - 31 julio, 2021
Los troncos de la familia Sang Ben, fueron Miguel Sang y Ana Ben. Juntos procrearon una larga familia de 9 hijos, cuatro hombres y cinco mujeres. Después de haber regresado a China en 1947, después de haber emigrado en 1936 y llegar a la República Dominicana, decidió, en 1949, volver a instalarse aquí en esta media isla del Caribe. Las guerras, con su secuela de miseria, lo obligaron a abandonar definitivamente su pueblo amado.
Al llegar otra vez a la República Dominicana, decidió quemar las naves espirituales del retorno. Se hizo dominicano, se convirtió a la religión católica y se integró activamente a la sociedad dominicana, convirtiéndose en uno de los hijos predilectos de Santiago de los Caballeros.
En el año 1986, con apenas 66 años, se le diagnosticó un cáncer terminal. Murió un año después. Durante esos largos 365 días de dolor volvió a recordar sus raíces. Además de orar a la Virgen de La Altagracia, una de nuestras patronas, se hizo devoto de la Kuan-Yin. Cada día, después de sus plegarias católicas, le encendía un incienso y le hacía la reverencia a la diosa china. Era quizás una forma de no olvidar su origen.
Esa devoción de mi padre en sus últimos días, me hizo amar a la Kuan-Yin y asumirla como parte de mi identidad. Las fotos que muestro son de mi pequeña vitrina en la cual hago un homenaje a mis raíces chinas. La imagen de una Kuan-Yin mayor está en la parte superior, indicando mi preferencia por ella. Dentro hay otra pequeña estatuilla hecha en jade de la Kuan-Yin. En mis momentos de tristezas y dudas, la invoco y me da paz.
Cuenta la historia que Kuan Yin o Kwan Yin era una maestra, que por su bondad fue ascendida como diosa. Se le conoce como la diosa del amor, la compasión, la misericordia y el perdón. Fue discípula amada de Buda.
El imaginario colectivo chino ha difundido la leyenda de que Kuan-Yin no descansará nunca hasta que pueda liberar a todos los seres humanos del sufrimiento, por eso atiende a todas las oraciones de los afligidos, por eso se le conoce como la madre que escucha el sufrimiento del mundo. Sus más fieles devotos afirman que si ella llega a tu vida es por alguna razón. Si te toca en tu vida, déjala entrar que te ayudará en los momentos de mayor tristeza, ya lo verás.
NOTA: ¿Qué lleva la Kuan-Yin en la mano? En su mano izquierda, sostiene un tallo con una flor de loto que reposa sobre su corazón, que simboliza la bondad que vive en el corazón de cada ser humano.
No hay comentarios